Lámina: Jesús llevando la cruz. Ribó d. Amillo g.

Grabado en portada

Dos ejemplares repetidos BH27868 y BH12809

Tabla de los capítulos de este tomo I Elogio del Combate Espiritual V Al Supremo Capitan y gloriosísimo triunfador Jesucristo, hijo de María santísima y Señor nuestro XI En qué consiste la perfección cristiana, para adquirirla es necesario pelear y combatir: y de cuatro cosas que se requieren para este combate 15 De la desconfianza de sí mismo 26 De la confianza en Dios 26 Cómo podremos conocer si obramos con la desconfianza de nosotros mismos, y con la confianza en Dios 37 Del error de algunas personas que tienen a la pusilanimidad por virtud 39 De otros avisos importantes para adquirir la desconfianza de sí mismo y la confianza en Dios 40 Del ejercicio y buen uso de las potencias y primeramente del entendimiento y necesidad que tenemos de guardarlo de la ignorancia y de la curiosidad 43 De las causas que nos impiden el juzgar rectamente de las cosas , y de la regla que se debe observar para conocerlas bien 46 De otro vicio que debemos guardar el entendimiento para que pueda conocer lo que es útil 50
Del ejercicio de la voluntad , y del fin á que debemos dirigir todas nuestras acciones, así interiores como exteriores 54 De algunas consideraciones que mueven la voluntad á querer en todas las cosas el agrado de Dios 63 Que en el hombre hay muchas voluntades que se hacen continuamente guerra 65 Del modo de combatir la sensualidad y de los actos que debe hacer la voluntad para adquirir el hábito de las virtudes 71 De lo que se debe hacer cuando la voluntad superior parece vencida de la inferior, y de otros enemigos 81 De algunas advertencias importantes para saber en qué modo se ha de pelear, contra qué enemigos se debe combatir, y con qué virtud pueden ser vencidos 86 Del modo en que el soldado de Cristo debe presentarse al combate por la mañana 89 Del orden que se debe guardar en el combate contra las pasiones y vicios 94 De qué manera deben reprimirse los movimientos repentinos de las pasiones 95 Del modo en que se debe combatir contra el vicio deshonesto 99 Del modo de pelear contra el vicio de la pereza 110 Cómo debemos gobernar los sentidos exteriores, y servirnos de ellos para la contemplacion de las cosas divinas 118 Cómo podrán ayudarnos las cosas sensibles para la meditación de los misterios de la vida y pasión de Cristo nuestro Señor 125 De otros modos de gobernar nuestros sentidos, segun las ocasiones que se ofrecieren 128 Del modo de gobernar la lengua 139 Que para combatir bien contra los enemigos debe el soldado de Cristo huir cuanto le fuere posible de las inquietudes y perturbaciones del corazón 144 De lo que debemos hacer cuando hemos recibido alguna herida en el combate espiritual 151 Del orden que guarda el demonio en combatir, así á los que quieren darse á la virtud, como á los que se hallan en la servidumbre del pecado 155 De los artificios que usa el demonio para acabar de perder á los que tiene ya en la servidumbre del pecado 156 De las invenciones que se sirve el demonio para impedir la entera conversión de los que hallándose convencidos del mal estado de su conciencia, desean corregir y reformar su vida, y de dónde nace que los buenos deseos y resoluciones muchas veces no tengan efecto 159 Del engaño de algunos que piensan que están en el camino de la perfección 164 Del engaño y de la guerra que nos suele hacer el demonio para que dejemos el camino que nos lleva á la virtud 167 Del último asalto y engaño con que procura el demonio que las mismas virtudes nos sean ocasiones de ruina 174 De algunos avisos importantes para mortificar las pasiones y adquirir nuevas virtudes 187 Que las virtudes se han de adquirir poco a poco y por grados, ejercitándose primero en una virtud y después en otra 193 De los medios para adquirir las virtudes y cómo debemos servirnos de ellas por algun tiempo para aplicarnos á una sola virtud 196 Que en el ejercicio de la virtud se ha de caminar siempre con continua solicitud 201 Que siendo necesario continuar siempre en el ejercicio de las virtudes, no hemos de huir de las ocasiones que se nos ofrecieren para conseguirlas 204 Que debemos abrazar con gusto todas las ocasiones que se nos ofrecieren de combatir para adquirir las virtudes y principalmente aquellas que fueren más difíciles y penosas 207 Cómo se puede practicar una misma virtud en diversas ocasiones 212 Del tiempo que debemos emplear en adquirir cada virtud , y de las señales de nuestro aprovechamiento 215 Que no debemos desear con ardor librarnos de los trabajos que sufrimos con paciencia y de qué modo debemos reglar nuestros deseos 219 Del modo de defendernos de los artificios del demonio cuando procura engañarnos con devociones indiscretas 222 Cuán poderosas sean en nosotros nuestra mala inclinación y la instigación del demonio para inducirnos a juzgar temerariamente del prójimo, y del modo de hacerles resistencia 227 De la oración 232 Qué cosa sea oración mental 240 De la oración por vía de meditación 244 De otro modo de orar por el camino de la meditación 247 De un modo de orar, fundado fundado en la intercesión de María santísima Nuestra Señora 248 De algunas consideraciones para que con fe y seguridad acudamos al patrocinio de la Virgen María 252 De un modo de meditar y orar por medio de los Angeles y de los bienaventurados 254 De diversos sentimientos afectuosos que se pueden sacar de la meditación de la pasion de Jesucristo 258 De los frutos que podemos sacar de la meditación de la Cruz y de la imitación de las virtudes de Jesucristo 268 Del santísimo Sacramento de la Eucaristía 277 Del modo de recibir el santísimo Sacramento de la Eucaristía 279 Cómo debemos prepararnos para la comunión á fin de escitar en nosotros el amor de Dios 284 De la comunión espiritual 297 Del modo de agradar a Dios 300 Del ofrecimiento 302 De la devoción sensible, y de la sequedad del espíritu 308 Del exámen de conciencia 319 Cómo en este combate espiritual debemos perseverar hasta la muerte 321 Del modo de prevenirnos contra los enemigos que nos asaltan a la hora de la muerte 324 De cuatro géneros de tentaciones con que nos asalta el demonio a la hora de la muerte: y primeramente de la tentación contra la fe, y del modo de resistirla 326 De la tentación de la desesperación y cómo podremos defendernos de ella 329 De la tentación de vanagloria 331 Del asalto de las ilusiones y falsas apariencias en la hora de la muerte 333

San Esteban

Sto. Tomás (Sevilla)